“El cine es el arte más difícil”. Lo dice quien atesora 4 Premios Goya y es una de las cineastas más laureadas, creativas y prolíficas de la industria audiovisual española. La productora, directora y guionista Chelo Loureiro (Ferrol, 1958) estuvo con el Club de Periodistas Gallegos en Madrid en vísperas del estreno de su última producción, “Justicia Artificial”.
La película, dirigida por Simón Casal y con Verónica Echegui, Alba Galocha, Tamar Novas y Alberto Ammann en el reparto, aborda un mundo distópico, pero muy cercano, en el que un algoritmo de Inteligencia Artificial ha sustituido a los jueces y se encarga de administrar la justicia.
“Justicia artificial” empezó a gestarse hace 5 años antes de que explotara la IA
Chelo Loureiro es coproductora del thriller, a través de Abano Producións, la productora con la que ha revolucionado el mundo de la animación en Galicia y en España. “Justicia Artificial” es un proyecto que comenzó a andar hace 5 años cuando aún no sabíamos lo que era la IA Generativa y todas las aplicaciones que están cambiando el mundo.
“Va a llegar un momento en que las máquinas van a sustituir a muchos trabajos. Estos días hicimos muchos pases para jueces, abogados, magistrados y todos nos dicen que la película es muy necesaria. Tras la proyección se crean unos debates interminables, la gente quiere hablar de ello”, contó la productora ferrolana.
Incluso el ministro de Interior, el magistrado Fernando Grande-Marlaska, que asistió al preestreno, le confesó que “toda la proyección le mantuvo en tensión y le hizo pensar y reflexionar. Nos decía que esta película es muy importante”. Y los juristas con los que ha hablado también se ven reflejados en el tono y la trama de la película.
“La justicia si es lenta no es justa y los juzgados están atascados. La película cuenta cómo en una sociedad distópica, muy próxima, se decide implantar un sistema de IA para sustituir a los jueces a la hora de dictar sentencias”, explicó Chelo Loureiro. Hasta Alberto Ammann, uno de los protagonistas, cuando vio la película terminada, reconoció que sintió pánico al ver hasta qué punto podía llegar la IA a sustituir a los humanos.
Chelo Loureiro, en conversación con Mari Carmen López Velasco y Pilar Falcón, del Club de Periodistas Gallegos, en el Centro Gallego de Madrid, se mostró preocupada por cómo estamos cediendo todos nuestros datos a las plataformas y aplicaciones digitales, incluidas las redes sociales.
“Como esos miles de satélites que Elon Musk (propietario de Starlink y Twitter) tiene en el espacio, que saben todo lo que hacemos y tienen medios para controlar el mundo entero. Es preocupante que tengan en sus manos tal cantidad de información”, dijo la cineasta. “La tecnología siempre va por delante y las compañías se aprovechan mientras no llega la regulación”, se lamentó.
El cine es el arte más difícil
La productora explicó las distintas facetas del trabajo del productor, un director de orquesta que obra el milagro de que un proyecto que empieza en una hoja de papel termine convirtiéndose en cine, fruto de un trabajo en equipo en el que intervienen cientos de personas.
“El cine es el arte más difícil, en el que intervienen muchos artistas, todos con su correspondiente ego. A mayor cualificación, mayor ego, es algo natural. El trabajo del productor es siempre administrar esos egos en pro de la obra. Lo más importante es la obra colectiva”, subrayó.
“La mayor parte de los artistas no saben cómo monetizar su arte. Y yo creo que sé cómo hacerlo, al menos lo intento”, dijo sobre una de mayores satisfacciones de su trabajo: contribuir a poner en el mundo la industria audiovisual gallega y conseguir dar trabajo a personas de tantos oficios implicados en el cine.
La cineasta ferrolana contó numerosas anécdotas de su carrera, como cuando fue a la entrega de los Goya por “Valentina”. Todos los niños que intervinieron en el filme querían ir a la ceremonia y, como no era posible, se vistieron de gala en sus casas y siguieron la ceremonia por televisión. “Podéis imaginar la presión de ver a todos fotografiados con las lentejuelas, la pajarita, el champán, porque me empezaron a enviar fotos por el móvil, y yo tan nerviosa pensando que no lo ganaríamos y la decepción que se llevarían. Cuando lo recogí, porque ganamos, fue muy bonito”, reconoció.
Y desveló el destino que han tenido los 4 Goya que ha ganado. Aún hoy algunos de ellos van pasando de una casa a otra, de las personas que intervienen en cada película, hasta el punto de que ella misma lleva un Goya en el maletero en sus viajes porque sabe que todo el mundo quiere verlo, tocarlo y fotografiarlo. “No hay nada que guste más a la gente que fotografiarse con él”, dijo entre risas.
Chelo Loureiro, que está a punto de llevar dos nuevas producciones a San Sebastián («Lola, Lolita, Lolaza», de Mabel Lozano, y «Yo voy conmigo/Go my way», escrita y dirigida por ella), destacó la importancia de los Goya y lo difícil que es ganar un solo premio, dado que es producto de la votación de cientos de académicos y hay grupos de interés, “lobbies”, como dijo con humor, donde el cine gallego está en minoría.
Por su parte, los cerca de 300 premios que atesoran en la productora Abano de su paso por tantos festivales tienen el valor de que son reconocidos por jurados especializados en competencia por películas animadas de todo el mundo.
E hizo un homenaje al papel de TVG en la creación de la industria audiovisual gallega, que es capaz ahora de ofrecer al mundo películas y series de calidad, incluso en lengua gallega, como “O que arde” y “O corno” y las películas de animación que producen en Abano Producións.
“La Televisión de Galicia -remarcó- fue absolutamente imprescindible para crear el entramado de profesionales del cine que hay en Galicia. Allí se formaron los profesionales que hoy trabajan por todo el mundo. Tras Madrid y Cataluña somos los terceros en España, por profesionales y por la calidad de la industria”.
Arranca el 40 aniversario del Club de Periodistas Gallegos en Madrid
El evento forma parte de los actos del 40 aniversario de la fundación del Club de Periodistas Gallegos en Madrid, constituido en 1984 y del que forman parte cerca de 200 profesionales que trabajan en el sector de la comunicación. Está presidido por Pilar Falcón.
“Chelo Loureiro: una mujer que viaja con un Goya en el maletero en el coche. Una mujer que quiere seguir mejorando el mundo con la animación para adultos, pero con los ojos puros que tienen los niños”, dijo Pilar Falcón al cerrar el acto e invitar a la cineasta a firmar en el Libro de Honor del Club.
Loureiro, productora, guionista y directora de cine de animación, fundó en 1997 la productora audiovisual Abano Producións, con sede en Ferrol, y ha recibido numerosos reconocimientos nacionales e internacionales, incluidos 4 Goyas:
- Mejor cortometraje de animación, en 2017, por “Decorado”, dirigido por Alberto Vázquez.
- Mejor largometraje de animación, en 2022, por “Valentina”, con ella como directora.
- Mejor largometraje de animación, en 2023, por “Unicorn wars”, dirigido por Alberto Vázquez.
- Mejor cortometraje de animación, en 2024, por “To bird or not to bird”, dirigido por Martín Romero.